Mostrando entradas con la etiqueta Picasso. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Picasso. Mostrar todas las entradas

lunes, 22 de junio de 2009

Gaston Joseph Engin, militante del conocimiento

Séneca dijo, alguna vez, que “Quien muere y es olvidado, dos veces muere.”. Es por esto que resulta importante y provechoso traer a la memoria los nombres de eximios personajes de la historia injustamente desvalorizados. Ya hemos mencionado a hombres como Thomas Seisyllwg, Kyle Capsize y Gabriel Bocángel. Es ahora el turno de explorar la vida y obra de Gaston Joseph Engin.
Engin nació en 1899 en el seno de una familia burguesa parisina. Tuvo una infancia desdichadamente nefanda; presenció el fusilamiento de su padre como resultado de un negocio turbio, a la edad de 6 años. Su adolescencia fue terriblemente funesta dado que su madre decidió suicidarse frente a sus ojos, ingiriendo dosis elevadísimas de pentazemina y benzodiasepina. Pasó entonces al cuidado de su abuela, una mujer desagradable de valores puritanos estrictos. Su primera y escuetísima relación amorosa la tuvo con la más joven de las criadas de la familia, la tentadora Christine Surmamelon, dos años mayor que él. Con ella tuvo una hija a quien abandonó en las escalinatas del Hospice de la Sainte Charité, para nunca volver a verla.
El joven fue un estudiante destacado y brillante. Acaso por esto, fue aislado por sus pares. Su única compañía por entonces fueron los libros heredados de su abuelo. En un primer estadio, se halló fuertemente influenciado por las ideas de colosales sofistas griegos como Carnéades, Filóstrato el Viejo, y, sobre todo, Apules de Argira (a quien se atribuye la inspiradora sentencia “Σκέψης είναι λόγος φύλο μπάλες λουλούδι φυλακή. Σώμα άλογο σκύλος γάτα το ποντίκι.”), todas leídas en una popular colección de la época “Philosophie pour Naissants”. En una segunda etapa, se adivinan fervorosas lecturas de Kant, Kierkegaard, Husserl, Jansson, Heidegger, Sade, Moumin, Nietzche, Proudhome, Marx y especialmente de Frederick Schelgenberg, cuya concepción materialista de la historia lo entusiasmaría mucho, llevándolo a afiliarse al Parti Communiste francés (al que, luego de una relectura más atenta de Schelgenberg, abandonaría por diferencias ideológicas). Entre sus primeras obras se encuentran: “Critique de la Psychanalyse dans une Perspective Materialiste”, “Critique du Materialisme dans une Perspective Psychanalyste” y “Critique de la Critique dans une Perspective Critique”. Todas las mencionadas, se presentaron en una única edición de 1924 denominada “Critique”, de 635000 páginas, sin contar el voluminoso prólogo.
Participó en el vigésimo cuarto Congrès Parisien de Philosophie, y tuvo la oportunidad de asistir a la famosa conferencia dictada en La Sorbonne por el maestro Johann Von Tür, que congregó a las principales figuras del pensamiento europeo de la época, excepto Lacan.
En 1938 conoció a Simone de Beauvoir, con quien tuvo amoríos fugaces para enfurecer a Jean-Paul Sartre, a quien había conocido en su época de estudiante. En palabras de Lacan, la relación entre Sartre y Engin fue siempre “como el segmento de la recta secante que une dos puntos pertenecientes a una misma curva con concavidad definida”. Pese a la gran amistad que los unió en su juventud, la obra “Sur le Mauvaise Compréhension de la Catégorie du Temps dans L’Être et le Néant” de Engin, publicada bajo el seudónimo de Jean-Paul Satyre, dio lugar a una amarga rivalidad malsana. En ella, Engin realiza una ácida burla de los principales postulados cardinales de la filosofìa sartreana, particularmente de “Manger est appropier par la destruction.”. La enemistad recrudeció cuando Engin se negó a firmar el Petitorio de Intelectuales Autoproclamados dirigido a De Gaulle, velando por la independencia de Argelia. La minimización de la violencia ejercida y la maximización de los derechos de integridad física de los argelinos fueron su justificación. Sartre calificó estos dichos de “petit bourgeois”, a su vez, Engin lo tildó de “gaucherét”. Sin embargo, consta que existió una gran admiración mutua; así por ejemplo se cuenta que con la aparición de la obra más importante de Engin, “Un Morceau de Fromage”, Sartre afirmó su sana envidia con estas palabras: “Lo daría todo por haber sido capaz de escribir algo tan grande como eso del queso.”.
Sus mejores amigos fueron el doctor Jacques Lacan, Theodore Adorno y los pintores Maximilien Hippolyte Croûte y Haanssens van Hoogsenbeeck. Son incontables las referencias al opus artis de estos últimos a lo largo de los ensayos de Engin, proveyendo numerosas exégesis de muchos de los cuadros. Particularmente la obra “Discussions sur l'Art” fue famosa por ser una de las primeras en llamar la atención sobre la obra del pintor holandés, a raíz del cual sentenció que “el arte jamás ha de intentar ser popular. Es el vulgo el que ha de intentar ser artista.”. También fue uno de los primeros en caratular sus obras de “conmovedoramente rompedoras”. Amigo también de Picasso, Albert Camus, Maurice Merleau-Ponty y Valentine Marie Augustine Gross, mejor conocida como Valentine Hugo, con quién también tuvo un exiguo devaneo.
En 1944, asistió a la lectura entre amigos de “Le Désir Attrapé par la Queue”, inmortalizada en aquella fotografía que ha recorrido el mundo, y que se reproduce en este artículo. Luego de poco más de una década de incesantes batallas contra la hemoglofagia HGV-N1, falleció en el Hôpital Saint-Louis, a los 83 años de edad. Se dice que sus últimas palabras fueron: “Metáfora de las metáforas: He vivido toda mi vida sólo para este moment…”

Entre sus muchas obras, destacan:
“Conférences sur le Materialisme Dialectique” (serie de conferencias dictadas entre 1949 y 1952).
“L'Essor des Nationalismes en Europe”
“La Généalogie de l'Histoire et l'Histoire de la Généalogie”
“Les Salons Parisiens” (compilación de ensayos de crítica artística de la juventud, al estilo de Saint-Beauve)
“Le Thérapeute” (conversaciones con el doctor Lacan)
“Les Belles Réalités”
“Les Affinités Électives” (Obra buffa)
“La Légende Des Siècles” (Análisis y crítica del retro-revisionismo histórico)
“Les Hereux Présages” (Novela)
“Les Puits de Vérité”(Ensayo)
“Le Bouchon d’Epouvante” (Obra teatral)
“La Clef des Rêves” (Ensayos sobre un nuevo modelo psicoanalítico)
“Le Modèle Rouge” (Ensayos sobre China)
“L'influence de la Pensée de Saint Simon dans l'Anarchisme Moderne”.
“Les Vacacances de Hegel” (Novela epistemológica)
“Histoire de la Philosophie: De Mégananolés à Sartre” (donde revela su gran erudición).
“Commentaires sur l'Oeuvre de Madame De Beauvoir, Le Deuxième Sexe”
“L'homme Cassé” (Novela)
“Grammaire Mise à Jour de l'Espéranto”

Imágenes:
Retrato de Gaston Joseph Engin a los 43 años. Fotografía. 1944.
Lectura de “Le Désir Attrapé par la Queue”. De pie, de izquierda a derecha: El doctor Jacques Lacan, Cécile Eluard, Pierre Reverdy, Louise Leiris, Pablo Picasso, Zanie de Campan, Valentine Hugo, Simone de Beauvoir, Gaston Joseph Engin, Brassaï. Sentados: Jean-Paul Sartre, Albert Camus, Michel Leiris, Jean Aubier.

lunes, 26 de enero de 2009

Haanssens van Hoogsenbeeck, artista ecléctico

Hoy es un día muy especial para el arte europeo y especialmente para la ciudad de Haarlemmermeer, siendo el centésimo vigésimo aniversario del nacimiento de uno de los pintores más celebérrimos de los Países Bajos: el ilustre Jan Adriaen Haanssens van Hoogsenbeeck.
Haanssens van Hoogsenbeeck, quien es actualmente considerado por la crítica especializada como uno de los artistas más “rompedores” de principio de siglo XX, comenzó sus estudios de pintura en el atelier del maestro impresionista Willem Temminhoek. Allí estudió tanto a los maestros del Barroco (siendo sus preferidos Vermeer y Linoonen) como a los impresionistas franceses. Su formación tan amplia lo dotó de una versatilidad plástica pocas veces vista y le permitió desarrollar un estilo personal e íntimo, logrando condensar diversas corrientes estéticas con fines artísticos.
Su primera gran obra se titula “El Infierno de las Hespérides”. Es un cuadro de proporciones inusualmente humildes (tan sólo 47x35cm) que plasma, posiblemente, sus emociones y pensamientos sobre su infancia en la campiña. Impregnado del estilo de su maestro, acaso deja translucir el genio de un artista que aún no ha hallado su propio estilo. Posteriormente, inspirado
por los principios neoplasticistas de Mondrian y Theo van Doesburg y por la sistematización compositiva establecida por Kandinsky y Klee en la Bauhaus, logró conciliar ambas corrientes y sintetizarlas en el extraordinario tríptico “Árida Desolación, Esperanza Fugaz, Búsqueda Ontológica”.
Convertido ya un artista consagrado, conoció, durante un viaje a París en 1947, entre otros, a Pablo Picasso, Maurice Merleau-Ponty, Theodore Adorno y Gaston Joseph Engin.
Cuatro años más tarde, acaso intuyendo la proximidad de su muerte, el eximio artista decidió plasmar en su última obra sus conclusiones tras años de meditación y contemplación del Universo. “Niets Natuur” es un óleo que expresa, quizás, la calma y el equilibrio de un espíritu pleno y anciano. Ejecutado con pinceladas à la Temminhoek, la más postrera de las obras retoma el estilo de las primeras, dando así al Opus Collectio un cierre a la manera de bucle infinito.
En palabras de Engin: “…ciertamente, no forma parte de la mentalidad moderna el pensar en Rafael como un excepcional pintor, siendo que la calidad de su inventiva transciende ampliamente el campo de la mera competencia profesional. Lo mismo puede decirse de Haanssens van Hoogsenbeeck: en sus trabajos, asistimos a un espectáculo en que la avasallante potencia de la imaginación eleva las impresiones visuales de una trascendental e imperceptible belleza inescrutable, superando ampliamente los límites del mero diseño consciente. ”

Imágenes: “Hel van Hesperiden”. 1906. Colección privada.
“Aride verlatenheid, kortlevend hoop, ontologische zoektocht”. Tríptico. 1925. Colección privada.
“Niets Natuur”. 1951. Nederlands Abstract Kunst Museum.